¿Qué aportes trae consigo?
El sector del turismo es uno de los grandes afectados por la crisis sanitaria del COVID-19. Las medidas de seguridad de cierres de fronteras, y confinamientos han hecho qué las marcas y/o empresas de turismo ya sea rural, costero o cultural, comiencen a pensar a largo plazo y cómo la nueva normalidad les va a afectar y, se están evaluando el lifetime value del cliente (lifetime value –> Las preferencias qué tienen los clientes a la hora de escoger un hostal, hotel…) y a su vez generar un feedback directo creando experiencias personales.
¿Qué aportará la IA?
Según con Javier Blanco, director de marketing de Paradores, «el perfil de cliente más habitual es persona de mediana edad sensibilizada con los destinos originales y auténticos a la que le gusta la cultura y la historia así como conocer y vivir bien el lugar que visita. Al incorporar los nuevos modelos se enriquece mucho la información básica obtenida por la actividad del cliente y sus datos demográficos; como consecuencia, se afina mucho más en el perfilado, pudiendo extraer submodelos dentro de un grupo homogéneo. Esto nos permite conocer mejor a nuestros clientes y poder ofrecerles una experiencia única en cada una de sus estancias».
Se confía en el poder de transformar el negocio a través de la IA, ya qué al conseguir datos extras se podrá amoldar perfectamente a las necesidades del público así creando las actividades qué más se buscan.
