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Reputación de marca. Addmira apuesta por las estrategias de SEO, SEM y Social Media. (es)

Hoy la red nos abruma con acrónimos, nombres y expresiones del tipo web 2.0, Social Media, SEO o SEM, dando la impresión de que han llegado a nuestras vidas como repentina vorágine de la que difícilmente podemos escapar.

Sin embargo, nada es, en esencia, nuevo, lejos quedan los años 90 (en el mundo digital) cuando aparecieron los primeros buscadores y con ellos los primeros profesionales que se hicieron llamar posicionadores web, para quienes su tarea principal fue la de garantizar la presencia de los sitios web en los buscadores existentes. Simultáneamente se fueron creando las primeras redes sociales, e Internet se iba convirtiendo en un lugar cada vez más sofisticado, abriendo la puerta a un sinfín de oportunidades en un mundo virtual donde poder convivir relaciones sociales y comerciales.

Un vasto universo en expansión en el que se han ido produciendo sinergias cada vez más complejas, y donde el prefijo inter– cobra hoy una dimensión espectacular, todo en la red es inter-dependiente, está inter-relacionado, inter-conectado, buscamos la inter-actividad. Atrás quedaron los sitios web unidireccionales en los que las marcas y empresas lanzaban sus mensajes esperando únicamente una respuesta de éxito o fracaso comercial. Evolucionamos así hacia la actual web 2.0 donde entre usuario y marca se produce un permanente diálogo que permite satisfacer las necesidades del cliente, resolver dudas, problemas, y mejorar el producto o servicio atendiendo a sus opiniones y demandas. Pero no todo acaba aquí, la red invita, o mejor dicho, exige a la marca la participación en las redes sociales, el mundo del Social Media por excelencia; lugares de análisis, opinión y tendencia, donde el cliente, a la hora de escoger marca o producto, deposita su confianza en la opinión y experiencia de otros usuarios. Las redes sociales se convierten pues en espacios de intercambio experiencial, donde la opinión e información que aporta el usuario adquiere, probablemente, mayor relevancia que la de la propia empresa. El resultado de todo ello, nos proporciona lo que hemos venido a denominar Reputación de Marca.

Pero todo esfuerzo resulta estéril si no conseguimos que los buscadores, principalmente Google, nos sitúen en sus primeras posiciones.  Entra aquí en juego el trabajo de SEO (Search Engine Optimization), y dentro de este  SEM (Search Engine Marketing). En este ámbito Google evoluciona cada vez más deprisa y ello está directamente relacionado con su nivel de exigencia. Actualmente los factores internos de una website, así como los enlaces desde otros sitios hacia nuestra página siguen siendo factores importantes de posicionamiento, sin embargo Google apuesta cada vez más decididamente por la calidad de los contenidos, es decir, por el valor que dicho contenido aporta al visitante, y el periodo de tiempo que dicho contenido resulta relevante. Ello nos obliga a un permanente testeo para averiguar las tendencias e intereses de nuestro público y trabajar para crear contenidos actualizados que sean altamente compartidos. Marcus Tandler, uno de los gurús del SEO, aseguraba en una de sus conferencias que el futuro del SEO estará directamente relacionado con el tráfico que reciba nuestra web. Google no valorará las páginas con el mejor SEO, o las que más presupuesto destinen al marketing online, sino aquellas que den el mejor resultado a la persona que busca algo en concreto

Pero la exigencia no acaba aquí, sino que en Google crece día a día la importancia de la popularidad o relevancia de los autores que crean esos contenidos y la “frescura” de estos. Billy Slawsky lo resumió argumentando: “Social media ha cambiado las expectativas de búsqueda de los usuarios. La gente que hoy en día busca algo,  quiere contenido más fresco, quiere saber lo que sus amigos y contactos tienen que decir, y quiere acceso a autoridades y expertos en diferentes temáticas y la opinión de estos sobre eventos puntuales y noticias. Los buscadores no tienen otra opción que responder a esto”.

Así pues, el principal buscador de Internet nos exige una gran especialización, convertirnos en expertos del universo virtual y de la Industria que representamos. Todo ello en un espacio donde ya nada goza de autonomía o tiene valor per se, sino que depende de la interacción con el mundo que le rodea y la calidad de sus relaciones. Un futuro un tanto impreciso e imprevisible, pero no por ello menos apasionante.

Nolasc Azcona

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